Efectes del canvi climàtic en els vins de carinyena en ecosistemes vulnerables. DOQ Priorat

Autores/as

  • Montserrat Nadal Roquet-Jalmar
  • Antoni Sánchez-Ortiz

Resumen

La composición de la uva y el tipo y estilo de vino son el resultado de la interacción de los factores del medio, el clima y el suelo, conjuntamente con el manejo antrópico. Uno de los retos de la viticultura actual frente el cambio climático es conseguir una producción sostenible que garantice una maduración óptima de la uva para obtener vinos de calidad. El ecosistema del Priorat, de clima cálido y seco, influido por el calentamiento global producido en estos últimos años, constituye un marco único para el estudio de la vulnerabilidad del cultivo de la viña. La variabilidad climática a final de maduración viene determinada, principalmente, por el aumento de temperatura y el déficit de presión de vapor. En años cálidos se registran las mayores diferencias fenológicas entre parcelas y regiones precoces y tardías; se llega al máximo de una semana en brotación y envero. Como resultado del seguimiento de la fenología en la variedad cariñena durante tres años, el inicio de brotación es independiente de las variaciones en la fecha de vendimia. Los cambios producidos en la fenología de la viña indican mayor variación interanual que intranual. En años cálidos, los vinos en zona precoç alcanzan grados alcohólicos más altos que en zona tardía; contrariamente, la acidez es significativamente más elevada en la zona tardía. Los antocianos presentan variabilidad en cuanto a la añada y situación de la parcela; en cambio, la acumulación de taninos es siempre superior en vinos de regiones precoces y en añadas cálidas. En general, las viñas que desarrollan más superfície foliar no son capaces de ahorrar agua suficiente y al final de maduración se produce la defoliación basal en la zona del fruto. En el otro extremo, las plantas poco vigorosas y con poca producción de uvas igualmente se presentan débiles y vulnerables al cambio climático. En añadas de sequía severa disminuye su rendimiento notablemente, el fruto presenta bayas deshidratadas con la consecuente disminución de la calidad de la uva. El presente estudio nos ha permitido, en diferentes situaciones, determinar unos rangos de concentración fenólica del vino de cariñena. El índice de polifenoles total (IPT) se encuentra alrededor de 45-51 en años temperados y de 45-72 en años más secosy cálidos. Independientemente del año y de las parcelas, los antocianos se hallan en un rango de entre 441 a 526 mg/L. Referente a los taninos, el intervalo se encuentra entre 1,1 i 3 g/L. La producción de vinos jóvenes tintos o de crianza se podrá determinar en función de la concentración en compuestos fenólicos de la uva y, según las condiciones de anyada y parcela, adaptar las técnicas enológicas precisas para destinar la uva a los diferentes estilos de vinos. La predicción de un intervalo de concentraciones de antocianos y taninos es de gran importancia para definir calidades y estilos de vino de cariñena (mazuela) de cepas viejas en la Denominación de Origen Calificada Priorat, dada la gran variabilidad interparcelar y el efecto causado por la añada en la composición de sus vinos.

Publicado

2018-10-22

Cómo citar

Nadal Roquet-Jalmar, M., & Sánchez-Ortiz, A. (2018). Efectes del canvi climàtic en els vins de carinyena en ecosistemes vulnerables. DOQ Priorat. Dossiers Agraris, 20, 43–62. Recuperado a partir de https://revistes.iec.cat/index.php/DA/article/view/100773.003

Número

Sección

Artículos